Enciclopedia de la Esencialidad
Campo Cuántico
La Física Cuántica y el Origen del Universo
La física ha confirmado lo que los místicos y las religiones han dicho durante milenios: que nuestro universo, nuestra existencia, viene de una fuerza creadora super-inteligente y omnipotente que opera más allá del universo físico. La física denomina “campo cuántico” a esta fuerza. Un campo es “una fuerza que actúa sin intermediación de una energía o materia”. En otras palabras, un campo es la nada actuando y operando con la fuerza. No tiene sustancia ni energía física. El estudio del campo cuántico es una rama de la física llamada mecánica cuántica.
La mecánica cuántica y el campo cuántico son conceptos ya comprobados por la ciencia y las pruebas de los mismos están literalmente al alcance de la mano. La mecánica cuántica, a diferencia de la mecánica clásica, habla de lo muy pequeño, como las partículas subatómicas que conforman las partículas. La mecánica cuántica ha permitido la minimización de la electrónica, al grado que en la actualidad una computadora completa, que hace años ocupaba todo un cuarto, cabe ahora en la palma de la mano, y es más poderosa que la computadora que hizo posible el envió a la luna de la nave Apolo. Tu teléfono celular es más poderoso que la computadora que permitió enviar al hombre a la luna en los años 70s.
No solo la física moderna ha descubierto el campo cuántico; también lo han hecho otras disciplinas que han buscado el origen del universo, o la causa de la materia y de la energía. Todas ellas se pueden sintetizar en dos direcciones principales y opuestas:
La primera va en la dirección de la astrofísica: el estudio de las estrellas, las galaxias, los cúmulos de galaxias, los supercúmulos y el cosmos en sí mismo. La astrofísica es el estudio de las cosas muy grandes, lejanas y antiguas (miles de millones de años de existencia). En 1929, el astrónomo Edwin Hubble, usando un nuevo telescopio de 100 pulgadas en el observatorio Mount Wilson en California, descubrió que el universo se está expandiendo a una gran velocidad. Las galaxias “vuelan” hacia afuera y separándose unas de otras como si estuvieran en la superficie de un globo en expansión.
Los astrónomos calcularon la dirección, velocidad y edad de las galaxias para rastrear luego su pasado (si se puede calcular hacia donde van, se puede saber de dónde vienen, siguiendo su trayectoria en el espacio y, si tienen una edad relativa, se puede calcular su inicio aproximado en el universo).
Al rastrear de dónde vinieron, descubrieron que todas las galaxias emanaron de un solo punto hace unos 13,700,000,000 de años. Ese puntito explotó creando el universo, incluyendo el espacio- tiempo, la energía y la materia. Dicha explosión es conocida como el Big Bang y se considera el origen del universo físico.
Cabe aclarar que el Big Bang ha sido guiado por la inteligencia que eventualmente creó nuestro mundo y a nosotros. El resultado del Big Bang no fue destrucción y caos como suele ocurrir con las explosiones provocadas por el ser humano. Esta explosión creó la realidad física que podemos observar; sus resultados muestran la creación, el orden, perfección y belleza de la vida.
La siguiente imagen es una gráfica artística del Big Bang, mostrando la expansión del universo desde ese evento hasta la formación de las galaxias y de las estrellas. La teoría más aceptada es que las estructuras que observamos hoy en día se formaron como consecuencia del crecimiento de fluctuaciones primordiales debido a la inestabilidad gravitacional. Las fluctuaciones primigenias causaron que los gases fueran atraídos hacia áreas de material más denso, jerárquicamente se formaron los supercúmulos, las agrupaciones galácticas, las galaxias, los cúmulos estelares y las estrellas. En realidad la expansión del universo es como una esfera “creciendo”en todas direcciones. La gráfica muestra solo una “rebanada” cónica de la esfera para mostrar la progresión sobre el tiempo desde el Big Bang a la izquierda, hasta el cosmos actual con sus galaxias y cúmulos “volando” y apartándose entre sí.
Claro que esto genera preguntas perfectamente lógicas y válidas como: ¿de dónde vino el Big Bang? ¿qué lo causó? ¿qué había antes del Big Bang? (No existían tiempo ni espacio, que fueron creados precisamente con el Big Bang). La ciencia se ha planteado estas preguntas y ha encontrado la Causa Última de nuestra existencia. (En un sentido, ha sido la búsqueda de Dios).
La única contestación que ha podido dar la astrofísica es: “perturbaciones en el campo cuántico”, que podría significar en otras palabras: una fuerza creadora más allá de lo físico. A esta fuerza descrita por los astrofísicos y por los físicos teóricos, nosotros la llamamos Esencia.
La segunda dirección en la que la física ha buscado el origen de la materia y de la energía es diametralmente opuesta a la seguida por la astrofísica: buscando en lo más pequeño, inmediato y fugaz de la materia.
Desde la invención del primer microscopio (Janssen, 1590, Holanda), el hombre ha penetrado sistemáticamente en la composición de la materia.
Primero descubrió las células en las plantas y la sangre, luego las bacterias, después los compuestos químicos de las moléculas; posteriormente los átomos que componen las moléculas, después los núcleos de esos átomos, y luego las partículas subatómicas.
Eventualmente los científicos advirtieron que las partículas no son materia sólida, sino patrones de energía, como los electrones y los fotones (partículas de luz).
Mirar el siguiente video dará más claridad:
Con mayor precisión aún, los científicos se dieron cuenta que estos patrones u ondas, en un campo subyacente, confirman la famosa ecuación de Einstein que demuestra que materia y energía son lo mismo: E = mc2. Ésta es la fórmula empleada para crear la bomba atómica, pero describe también el comportamiento de las estrellas, y la razón por la cual la materia se convierte en energía.
Descubrieron que los patrones de energía- partículas (“quanta”) no son permanentes ni duraderos, sino que destellan dentro y fuera de la existencia, y algunos duran solo milésimas de segundo.
También se podría considerar a tales patrones de energía como campos en sí mismos (“minicampos” de fuerza capaces de interactuar con otros “minicampos” de fuerza). Se puede decir que la energía y la materia son excitaciones u ondas dentro del campo cuántico. Se puede afirmar asimismo que toda energía y materia son vibraciones en un campo.
Descubrieron que las partículas-ondas-excitaciones-energías básicas de la materia están apareciendo y desapareciendo continuamente dentro y fuera de la existencia como olas que se levantan en el océano, o como luciérnagas que relampaguean de manera intermitente en la oscuridad. (Técnicamente las partículas son “estados excitados de una campo subyacente”). Estas apariencias de energía-partículas surgen de la nada, del campo cuántico, y son influenciadas por la conciencia del observador. Se puede considerar al universo como un gran campo del que surgen la materia y la energía formando una ilusión, un campo de juego con experiencias de muchos tipos.
De nueva cuenta, podemos observar que lo que aparece momento a momento del campo cuántico es algo inteligente: los patrones de energía forman el universo racional, ordenado y estructurado en el que existimos, disfrutamos y amamos.
Un holograma es una analogía perfecta para comprender la creación dentro del campo cuántico. Un holograma es una figura tridimensional formada en el espacio por un halo de luz. La interferencia que se produce entre dos haces de luz coherentes hace posible que la luz de uno de estos se reflecte en el objeto. Ésta, al recibir una luz desde la perspectiva adecuada, proyecta una imagen en tres dimensiones. Parece un objeto real, pero solamente es luz, una proyección, una ilusión. Todo el universo físico se ve así desde la Esencia. Un día tú podrás tener la experiencia de percibir así a la materia sólida, como patrones de energía (cuando seas un alumno avanzado ya que es un paso en tu Despertar).
Son dos los puntos que queremos recalcar de todo lo mencionado anteriormente:
1 – Existe una fuerza creadora más allá de lo físico y comprobada por la ciencia física. Sin importar si se investigue desde el punto de vista de lo muy grande y lejano (astrofísica), o desde lo muy pequeño, cercano y ocurriendo aquí y ahora (física cuántica).
La física lo llama campo cuántico. Los místicos lo conocen como Tao, Brahma, Shiva; las religiones lo llaman Dios, Allah, Jehovah, etc. Nosotros lo vamos a llamar Esencia, porque es la esencia única, la sustancia fundamental de todo lo que existe, incluyéndote a ti. El punto a resaltar es que todos—científicos, místicos, religiones—, están de acuerdo en que existe una fuerza creadora más allá de nuestro universo físico.
De hecho, el campo cuántico es tan solo una pequeña parte de la Esencia. Es la parte especializada en y dedicada a generar los universos materiales. Es decir, el campo cuántico está “dentro” de un campo infinitamente más grande: la Esencia. (A su vez, la Esencia es un “campo” dentro de un campo aún mayor, el Absoluto).
2 – Esta fuerza creadora, la Esencia, es poderosa y super-inteligente. Poderosa porque crea o manifiesta nuestro universo. Inteligente porque la energía emanada del Big Bang y que surge del campo cuántico no es caótica, sino que toma formas y patrones con sentido para nosotros, forma un universo que realmente funciona, incluyendo los cuerpos vivos.
En la Esencialidad, vamos todavía más allá de estos dos puntos, describiendo qué es la Esencia, tu relación con Ella, y la manera en que puedes percibir, sentir, y eventualmente vivir de forma permanente en la experiencia de la Esencia (el Amor-Alegría). Lo que nos interesa es que contactes a la Esencia. (A partir de ahí, puedes visitar al Absoluto si deseas, dando un pequeño paso adicional).
Ahora vamos a expresar un valor. Declaramos que vivir en la experiencia de la Esencia es el valor más elevado de la vida. Declaramos que es la única felicidad verdadera. Es el “Enlightenment”, la Iluminación espiritual, el Nirvana, el Reino de los Cielos, el estado de seres como Buda y Jesucristo.
Declaramos que, ya que tú eres Esencia, puedes reencontrarte Contigo Mismo, volver a sentir tu Esencia en esta vida.
Declaramos que no te llevará vidas (como enseñan algunas escuelas), que no tienes que morir para ir al Cielo, como enseñan algunas religiones. Puedes volver a vivir en contacto permanente con la Esencia de manera relativamente fácil y rápida (con algunos años de trabajo en ti mismo) siguiendo el protocolo de la Escuela de Esencialidad.
Así que, bienvenido al reencuentro y exploración de Tí Mismo, el Creador del Todo Lo Que Existe. Tú eres la Esencia, la Totalidad de Ella.