Enciclopedia de la Esencialidad
Dos Caminos al Fallar
Los niveles más altos del Poder son la impecabilidad seguida de la excelencia.
La impecabilidad no tiene fallas; la excelencia tiene muy pocas.
No nacimos siendo impecables—es algo que tenemos que desarrollar. En el camino hacia la impecabilidad vamos a tener seguramente muchas fallas. La impecabilidad (un alto nivel de Poder) depende de la manera en que se manejan las fallas. La única forma de alcanzar altos niveles de Poder es a través de un sistema para manejar las fallas, el Sistema de Impecabilidad (compuesto por acontabilidad, bitácora de fallas, conciencia y reportes, consecuencias, reposición de energía y cerrar ciclos).
Fallar significa mediocridad y mala calidad: es lo opuesto a la excelencia y la impecabilidad.
Y siempre que fallas pagas los precios de tener pocos, malos o nulos resultados y pérdida de TE para ti y para otros. Siempre que fallas, estás demostrando mediocridad en tu ser y en la calidad de ser causa, en tu poder personal, y ni hablar en tus resultados.
Sin embargo, el punto álgido no es tanto la falla, sino la manera en que se va a manejar la misma. La cuestión es si vas a permanecer en la mediocridad y continuar fallando y pagando los precios;
o…
si vas a usar la falla para mejorar y lanzarte hacia la excelencia y más allá, a la impecabilidad.
Solo hay dos caminos
Cuando cometes una falla o un error tienes dos posibilidades de responder, o dos caminos a seguir:
Camino #1: Permanecer en la mediocridad
El primero es seguir adelante como si nada, sin acontabilidad (sin la concienciación de un reporte, una consecuencia y una reposición de energía).
En este caso, tú mismo estás tolerando tu falla y asintiendo que seguirás fallando; estás siendo condescendiente con tu mediocridad. No hay excélsior en ti como ser; no hay probabilidad de que mejores tus resultados en el futuro. Tu desempeño es mediocre y va a continuar siéndolo.
Nota que la mayoría de los seres humanos siguen en tal mediocridad toda la vida. Sus vidas están llenas de ciclos demorados, caídos, de fallas y errores y nunca lo cambian; nunca mejoran.
Camino #2: Excélsior hasta la Impecabilidad
El segundo camino es usar la falla para aumentar en conciencia y excelencia y seguir creciendo hasta lograr la impecabilidad.
La Esencialidad tiene un sistema para lograr esto: el Sistema de Impecabilidad.
