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Enciclopedia de la Esencialidad

Ego

Ego es la fuerza creadora que individualiza a la Energía. El ego crea la ilusión de individualidad separada dentro del campo de la Energía Universal. Ego es la fuerza que individualiza las cosas generando la ilusión de partes separadas y aisladas unas de otras. Ego es lo que crea la ilusión de no ser el Uno; crea la ilusión de la multiplicidad.

La Creación, incluyendo nuestro universo físico y este mundo, son realidades ilusorias dentro de la Verdad Última del Uno-Todo. El ego es una creación de muy alto nivel de la Esencia, para hacer posible la apariencia de la individualidad dentro de Ella. El ego es la fuerza creativa que individualiza al Uno-Esencia, la Conciencia, para crear la ilusión de separación, de individualidad, de seres y objetos separados unos de otros. El ego es una decisión (Voluntad) creadora de la Esencia que proyecta la ilusión de la individualidad sobre toda la Creación, reduciendo así, o escondiendo totalmente la experiencia de Unidad.

En Verdad existe una sola Conciencia, un solo Ser; todo es la misma Esencia; todo es Uno. El ego divide (parte de) esa Conciencia en (la ilusión de) conciencias individuales. Crea la ilusión de conciencias separadas, de seres separados y menores que el Uno, distintos, de otros seres, de las otras “partículas” de lo que es una Sola Conciencia. El ego separa ilusoriamente las cosas, “ocultando” a la Conciencia (en menor o mayor grado), la experiencia de la Unidad.

Las conciencias así separadas no son egos. No hay muchos egos como suele afirmarse en la psicología. Existe un solo ego, una sola fuerza generadora de la ilusión de individualidad, subyacente a toda la Creación. Ego es la fuerza separadora, no las conciencias separadas, ni los seres así creados.

Un ser es una conciencia. Tú eres una conciencia. Como “conciencia” cada ser es una “partícula” (ilusoria) de la Conciencia Única, viviendo la ilusión de individualidad, separación y distinción, generada por el ego. El ego “separa” la Voluntad-Consciente-Única-Total; crea “gotas” de Esencia. Las “gotas” no son “egos”: siguen siendo Esencia-Voluntad-Conciencia, solo que ahora su conciencia está en la ilusión de ser menos que la Totalidad.

Gotas de mercurio

Gotas de mercurio

La “gota” nos conduce a una buena analogía. Imagina que la Esencia Única, el ser Único-Todo, la Conciencia, es un lago infinito de mercurio. Puedes separar las gotas que quieras del lago de mercurio, pero cada gota sigue siendo mercurio (Voluntad-Conciencia). Aunque cada gota ahora parece estar aparte y ser limitada, no pierde su Esencia, y solo en ilusión “pierde” la (experiencia de) la característica del Uno. La fuerza que divide al mercurio en gotas es el ego. Cada gota no es un ego. Cada gota sigue siendo Conciencia (y todas las otras características de la Esencia).

El ego es una fuerza que se “aplica” a la Creación. Es como la fuerza de gravedad en el universo físico, en este planeta. La gravedad actúa sobre todos; todos estamos sujetos a ella. A todos por igual nos atrae a la superficie de la tierra y nos mantiene “abajo”, en su superficie, pero es una sola fuerza.

¿Cómo sabes cuándo y dónde hay ego? Estamos en un mundo de ego. El ego es lo que te individualiza y aquello de lo que tú te individualizas. El ego es lo que te hace percibir a otros y a las cosas como distintos a ti mismo, a tu ser. Simplemente con que mires a cualquier cosa o persona y las experimentes como algo distinto a tí mismo, hay ego: estás experimentando la individualización de ti mismo respecto al otro. Eso es ego funcionando, actuando sobre tu conciencia de manera similar a como la gravedad actúa sobre tu cuerpo. Estás experimentando ego cuando ves a otra persona y no la percibes como siendo Tú Mismo; no percibes al Uno.

El ego es parte de la naturaleza del mundo. El ego es lo que sostiene al mundo en la ilusión de separación e individualización. La función del ego es mantenernos dentro de la ilusión de entidades distintas y separadas, con el fin de que existan el mundo y sus juegos. Cuando caminas por la calle percibes a una infinidad de personas y de cosas como siendo “no-tú”. Cuando te encuentras en el supermercado: ¿cuántas cosas ves separadas de ti? Esta percepción existe porque hay ego.

Gracias al ego, tenemos la ilusión de los “otros” con quienes podemos jugar y a quienes podemos amar. Gracias al ego, no estamos solos. El ego crea y sostiene al mundo en la “ilusión óptica” de seres individualizados, separados y aislados—de manera similar a como un prisma separa los colores de la luz, o un proyector de películas separa las figuras proyectadas por la luz en la pantalla.

Gracias al ego, sabemos quiénes somos nosotros y quiénes son los otros al mismo tiempo. Si todos despertáramos del ego, percibiríamos solo al Uno. Nuestro mundo humano como lo percibimos ahora, con todos sus juegos de distinción y división, no podría existir. Hay que comprender, aceptar y valorar que vivimos en un mundo de ego.

El Despertar consiste en salir parcialmente del ego, de la fuerza separadora, para trascender el aislamiento de la conciencia y darnos cuenta que solo existe la Conciencia Única, y que somos parte de Ella.

Analogía de la malla para explicar el ego

Se puede pensar en el ego como un filtro, una malla, una película, o un campo proyectado sobre la Creación para generar la ilusión de individualidad.

Imagina una luz brillando, la que representamos a continuación con un cuadro amarillo. Esta Luz representa a la Esencia, la Conciencia Única Universal, el Uno-Todo. Nuestro cuadro de Luz amarilla-la Esencia no tiene distinciones; todo es Uno, un solo ser.El Uno Conciencia Universal representado por un campo amarillo.

Luego creamos el ego, representado por el filtro o malla negra que ves a continuación:

El ego como una cuadrícula de líneas negras.

Ahora tomamos la malla-ego y la ponemos encima del cuadro amarillo que representa la Conciencia Única:

El ego representado por la cuadrícula sobre el Campo de la Conciencia, representada por el fondo amarillo.

Observa cómo la malla negra del ego separa la Luz amarilla (la Conciencia Única) dando la apariencia de conciencias individuales. Las conciencias han perdido la “conexión”, la experiencia de que son una y la misma Conciencia. Ahora se perciben como separadas y aisladas unas de otras. Ahora parece que hay muchas. Eso es el ego trabajando sobre la conciencia.

También podemos hacer esta analogía con una malla circular. El ego es la malla circular que aparece a continuación:

El ego representado por una rejilla negra sobre un fondo amarillo formando círculos que representan la conciencia individualizada.

De nueva cuenta tomamos la malla negra del ego y la sobreponemos a la luz amarilla de la Conciencia Universal, creando la ilusión de individualidades separadas.

Cada círculo ahora es una conciencia individualizada que se siente separada de los otros círculos de Luz. El ego es la malla, no el amarillo de la Conciencia (Luz). El amarillo sigue representando a la Conciencia y, más allá de la ilusión del ego, sigue siendo la misma Conciencia. El ego solo genera la ilusión de no ser la Conciencia Única, de ser menos que la Totalidad de la Conciencia Universal.

Espectro del ego: ego positivo y ego negativo

Dentro del ego hay un espectro. Este espectro corre desde el ego positivo ligero (a través del cual se pueden percibir la Esencia y la Unidad), pasa a través del ego positivo humano ordinario, y desemboca en el ego negativo más fuerte.

El ego tiene un espectro de gradiente, de la fuerza o densidad de la separación.

El ego positivo humano existe cuando una individualidad reconoce la igualdad de valor en los otros. El ego negativo es una individualidad tratando de resaltar su individualidad (ser más) tratando de hacer menos a los otros. Es lo opuesto a buscar la unión y la igualdad. No se puede entender el ego sin haber entendido el espectro. (Véase: Espectro del ego y Ego negativo).

El ego en sí mismo es una ilusión, parte de la Creación, creada por y de la Esencia. Ya que tú eres Esencia, el Todo, también eres el ego. Eres Todo y es precisamente el ego quien te bloquea esa experiencia. Todos tenemos ego pero se trata de un mismo ego, de igual manera en que todos tenemos Conciencia y se trata de la misma Conciencia. Tú “yo” y el “yo” del otro es el mismo “yo”.

Dentro de la ilusión, de la Creación, todo es perfecto incluyendo el ego. Hay que reconocer y aceptar que vivimos en un mundo de ego. El ego es maravilloso, es una pieza fundamental y esencial para que la ilusión sea posible. Sin el ego no existirías como crees que eres (un ente individual) y no existiría el mundo, ya que el ego nos mantiene en la ilusión, en el juego.

Propósito del ego

El ego es una parte necesaria para muchos juegos en la Creación. Es necesario en todos los juegos que requieren individualidad (la gran mayoría de la Creación manifestándose en muchas dimensiones y universos).

El ego crea la ilusión de los “otros” para tener con quienes jugar.

El ego crea la ilusión de los “otros” para tener a quienes amar (además de a Uno Mismo).

El ego permite la experiencia (aunque ilusoria) de no ser el Todo,
para que poder tener la experiencia de re-descubrir Quiénes Somos.

El ego positivo sostiene nuestro mundo como seres individuales, como seres humanos distintos. Permite todos los juegos personales y grupales, de aliados y enemigos. Sin el ego positivo, nuestro mundo no podría existir como es.

Los seres

Una vez que tenemos la ilusión de una individualidad separada y, por tanto, la ilusión de que hay muchas conciencias, entonces podemos diferenciar a cada una (a cada cuadro dentro de la malla) con una combinación única de características. Cada combinación es la Conciencia siendo esa combinación: a eso le llamamos un ser. (A la combinación única de características de un ser humano le llamamos “avatar”). Un ser es el Uno siendo algo en particular dentro de la Creación. Instala un avatar en un cuerpo humano y tienes un ser humano.

Un ser humano = Esencia → ego + avatar + cuerpo humano.

Así, nuestro mundo parece lleno de seres individuales, distintos y únicos. Pero la Verdad es que todo es una sola Conciencia, un solo ser, jugando Consigo Mismo, como un juego de las escondidas. Me escondo de Mí Mismo en otros.

Cómo el campo generador de ego delimita la conciencia para generar la ilusión de la individualidad.

Objetivo del ego en la Esencialidad

El objetivo en la Esencialidad es que cada alumno trascienda su ego lo suficiente como para poder percibir su Esencia y su Unidad. Para percibir tu Esencia y Unidad no es necesario descrear tu ego positivo, tu individualidad humana por completo; solo “adelgazarlo”. Pero sí es necesario salir por completo del ego negativo.

Puedes seguir disfrutando el juego humano dentro de tu individualidad. Pero queremos añadir la experiencia de estar Despiertos a Quienes Somos realmente: la misma Esencia, el mismo Ser. Cuando hayan Despertado suficientes seres humanos, habrá un salto cuántico en la conciencia planetaria. Comenzará una nueva era de paz, cooperación, juegos creativos y abundancia para todos.

Como hemos dicho, para volver a vivir en la experiencia parcial de tu Esencia (el “Enlightenment”), tienes que reducir, “adelgazar” el ego. Tienes que eliminar todo ego negativo (como se explica en el artículo sobre ego negativo).

Más allá del “Enlightenment”, hay un nivel de espiritualidad que es la Iluminación Total. Este nivel sí requiere trascender el ego por completo, pero pocos seres humanos van a querer alcanzar este nivel en esta etapa de la evolución espiritual del planeta Tierra.

No es TU ego

En todo caso, es importante comprender que NO es TU ego, es EL ego. Es una sola fuerza de individualización a la que estamos sujetos todos, toda la raza humana. Como hemos dicho, el ego es como la gravedad: se aplica a todos y nos afecta por igual. Como la gravedad, tienes que escapar del ego negativo para volar espiritualmente, y es lo mismo para todos.

Tú, como Esencia, eres Creador del ego y puedes controlar la fuerza del ego. Cuando comprendes esto y trabajas en ti espiritualmente, vas lo reduciendo para recuperar la percepción de la Unidad y el Amor.

El ser humano inconsciente a menudo cae al efecto de su ego y desciende en el espectro hasta el ego negativo. Lo decimos otra vez: para volver a sentir tu Esencia, sí tienes que salir completamente del ego negativo.

Ejemplo de ego

Imagina que te encuentras en una montaña boscosa, solo en compañía de la naturaleza. Ves los árboles, pero no te fijas en cada árbol individualmente, sino que percibes el bosque como un todo. Al tener esta sensación, no hay tanto ego y te sientes feliz; estás contactando más a tu Esencia.

Persona contemplando un valle entre el bosque

Ahora, teletranspórtate de las montañas, a una calle del centro de la Ciudad de México. Al ver pasar a las personas, ya no las ves como un todo, como los árboles, sino que notas a los individuos. Ahí va una rubia, allá un indigente, acá un mariachi, por allá un hombre de negocios, por acá una prostituta; sin siquiera pensarlo, les pones etiquetas. Ves a cada uno como muy diferente de ti y de otros. Tu mente está trabajando y tu sensación es diferente. Te fijas más en la individualidad y la separación: eso es más ego. Más aún, si le agregas que ese hombre no debe de ir vestido de mujer y esa mujer no debe ir con una falda tan corta, estás entrando en el bien y el mal y el ego negativo.

Multitud caminando en la calle

Hay que recordar siempre que toda la Creación es una ilusión y que todo es Uno, una sola Esencia. El ego es el Uno-Esencia-Amor reduciendo la experiencia de Sí Mismo, el Infinito a algo muy finito y limitado. Es necesario recordar que el ego es una ilusión, como lo es toda la identidad humana (avatar y cuerpo). El ego es parte de la Creación, ergo parte de la ilusión que es el mundo—no es Quien Eres. Eres Esencia y el Uno-Todo.

Desde un punto de vista elevado, desde la Esencia, tú eres el Creador del ego. Desde un punto de vista más bajo, eres el filtro de la individualidad, es decir, eres el ego. Como el ego, eres lo que sostiene al mundo. Desde más abajo, dentro de la Creación, simplemente hay ego y su resultado, la individualización. Todos tenemos ego pero es el mismo ego. Puedes verte como que eres una cosa individualizada (tal como lo plantea la psicología), pero no eres un ego diferente al ego de otros.

No puede haber ninguna creación que resistas para volver a tu Esencia. Para Despertar tienes que ver al ego, tanto positivo como negativo, como lo que es, ni malo ni bueno, solo lo que es. Como alumno de Esencialidad, igualmente no puedes resistir nada; tú eres Todo. Desde la Esencia tú eres el creador de Todo, incluyendo lo que creas de Ti Mismo: ¿cómo te vas a resistir a Ti Mismo? Tienes que re-integrarte a todo para recuperar la experiencia de Quien Eres.

El ego negativo y la humildad

El ego negativo resulta cuando una conciencia está tan perdida en la ilusión de separación que cree que otros son diferentes a ella en Esencia. Al perder conocimiento de la Esencia Única, puede caer en las alucinaciones de “más y menos”, “mejor y peor”, y “bueno y malo”. De allí, puede caer aún más “bajo”, en la alucinación de que está justificado el uso del amor negativo para pisotear a otros en un intento de destacar sobre ellos.

En el polo opuesto del ego negativo están la humildad y el amor. La humildad es la evaluación verdadera de todo, que todos somos uno y por lo tanto iguales. La humildad es darte cuenta que ninguna “parte” del Uno es más o mejor que otra “parte”, ya que Todo es Uno. De hecho, no existen “partes”: solo el Uno. En la humildad avanzada, ni siquiera ves al otro como parte de ti, sino como Tú Mismo en la Unidad. No existe un “otro” a quien sentirse superior o inferior.

Como dijo Jesucristo (cuando lo traducimos correctamente): “Únicamente los humildes entrarán al Reino del Cielo (volverán a su Esencia)”. Véase: Humildad.

Por todo lo anterior y porque eres Amor Absoluto; es importante no ver al ego universal como algo malo; al ego positivo, o al ego negativo. El ego es necesario. Particularmente, evita vilipendiar al ego negativo. Hacerlo es más ego negativo. Resistir al ego negativo es como echar gasolina para apagar un fuego.